La vida le regaló una segunda oportunidad al presentador de Oye TV Mauricio Herrerabarría durante sus tan anheladas vacaciones en Cuba; y es que durante su estadía en la isla vivió un episodio que jamás podrá borrar de su mente.
¿Qué le pasó?
Mauricio contó que la noche del 28 de noviembre en un evento de salsa, conoció a una pareja que le habló maravillas del citado país, tanto es así que logró entablar una larga conversación con los cubanos. Al final de la noche y por casualidades de la vida, al momento de salir del baile, cuando iba camino a su habitación, la pareja se dirigía al mismo lugar que Mauricio, así que decidieron caminar juntos y seguir la plática.
En medio del camino decidieron parar en una cafetería y fue ahí cuando los cubanos le hicieron una mala jugada, cuando en un descuido del presentador por ir al baño le llevaron su maletín con sus pertenencias, donde cargaba el pasaporte, cámara fotográfica y demás artículos personales.
Herrebarría interpuso la denuncia ante las autoridades de ese país y cabizbajo, emprendió otra vez su camino a casa, pero por segunda vez se llevó otro chasco. ¡Pobreee!
Añadió que a unos metros de donde se encontraba logró divisar un bar y una de las chicas del lugar se le acercó para preguntarle que por qué estaba tan triste. Él se aferró a la joven y le confesó lo sucedido, a tal punto que volvió a caer en la trampa de personas malintencionadas, ella le preguntó si recordaba quiénes habían sido las personas que le robaron y que a lo mejor podía conocerlos. Mauricio sacó su celular que tenía bien guardado en su pantalón y le mostró una foto de los susodichos.
Según la joven, ella conocía al padre de una de las personas que le habían robado, y ante la desesperación, Mauricio volvió a caminar junto a desconocidos hasta llegar a la casa del supuesto padre de la atracadora, estando allí llaman a los "ladrones" y como respuesta piden que vayan a buscar las pertenencias de él que le iban a ser devueltas y que no había necesidad de interponer denuncia.
El señor subió al "fashionista" a un vehículo en el que ya se encontraba sentado otro hombre, mientras que él Mauricio tenía la sospecha de que esa noche no iba a terminar bien. "Yo decía en mi mente que si me iban hacer daño, que fuera rápido, pues no quería sufrir", mencionó.
Sin pensarlo, Herrebarría se lanzó del auto en marcha y quedó así con raspones en el rostro y una herida en la cabeza.
No quiere hablar más
Al llamarlo y preguntarle más sobre este suceso, este respondió: "Compartí la historia para poder dejarla atrás y no quiero volver a hablar más sobre ella. Este fue no mi viaje soñado a Cuba que me cambió la vida, sino lo que hizo Cuba fue regalarme una vida totalmente nueva".
"Si me iban a hacer un daño o iba a morir, iba a extrañar tanto correr, sudar, escuchar mi música, leer, ir al museo, abrazar a mis familiares y a mi perrita Venus", dijo.
Su viaje soñado se convirtió en pesadilla. Le robaron y quedó tirándose de un auto en marcha.
Son tantas las historias que probablemente seguiré escuchando sobre la vida, y seguramente tan pocas las que dirán sobre la muerte. No sé aún de qué es la mía, quizá de ambas, quizá de ninguna. Pero sí es de oportunidades, oportunidades que no se niegan, que no se dejan pasar; cuando la vida te tiende la mano, a veces no es malo agarrar el brazo.